Mazatlán, Sinaloa. – Venados de Mazatlán cuenta con una afición inigualable que ha hecho de cada partido en el Estadio Teodoro Mariscal una experiencia inolvidable por 79 años.
La pasión y el fervor de los fanáticos mazatlecos se han convertido en el motor que impulsa a los jugadores, quienes reconocen el poder de contar con el apoyo incondicional desde las gradas, como Édgar Ahumada y Diana Gutiérrez que son socios desde hace 38 años.
El matrimonio siempre está presente para apoyar a los rojos y disfrutar del beisbol, así como de unas buenas salchichas.
“Yo creo que desde novios ya veníamos, siempre estamos apoyando al equipo, nos gusta el beisbol, a eso venimos y a comer salchichas que nos gustan mucho”, comentó Édgar.
Los cánticos, las olas y el inconfundible sonido de las matracas ya es una tradición mazatleca, que cada invierno se vive en el Teodoro Mariscal, casa de los mazatlecos.
Martha Ocampo y Cindy Osuna son aficionadas de Venados desde hace 30 años, esperan el mes de octubre para no faltar a la temporada de beisbol, donde disfrutan los encuentros en familia.
Está el caso de la familia Loaiza Aguirre, que por 15 años han portado su gafete de socio y cuentan con una larga lista de jersey en su colección, de todas las épocas, están presentes en los encuentros desde la primera entrada para no perderse los detalles de los encuentros.
La afición de Venados es conocida por ser una de las más fieles y apasionadas de la Liga ARCO Mexicana del Pacífico, siempre apoyando al equipo en cada encuentro.
Este jueves y viernes las puertas del Estadio Teodoro Mariscal se abrirán a las 18:00 horas, para iniciar los encuentros a las 19:00 horas, mientras que sábado y domingo la apertura será a las 16:00 horas y a las 17:00 horas se cantará el Play ball.